Este encuentro, que ha sido descrito como “histórico y de gran sensibilidad humana”, se enmarca dentro de una agenda estratégica que busca compartir experiencias e impulsar nuevas iniciativas para la educación integral de la Primera Infancia, así como promover una inclusión efectiva para los niños y niñas en situación de vulnerabilidad.

Durante su estadía, la Primera Dama Gabriela de Bukele visitará instituciones emblemáticas como la Fundación Lalla Asmaa, el Centro de Diagnóstico y Rehabilitación Auditiva y el Centro Mohammed VI de Investigación e Innovación, todos ubicados en la ciudad de Rabat. Estos espacios representan pilares de atención y esperanza para miles de infantes, y constituyen un modelo de políticas públicas que inspiran a muchos países del mundo.

La agenda contempla además visitas a centros educativos, encuentros con especialistas en desarrollo infantil y juventud, así como espacios de diálogo con autoridades marroquíes comprometidas con el bienestar social. Este acercamiento no solo refuerza el compromiso de ambas naciones con el desarrollo humano, sino que abre una valiosa ventana de oportunidades para la cooperación en áreas claves como la salud, la inclusión y la educación temprana.

Más allá de los protocolos, la visita de la Primera Dama salvadoreña ha estado revestida de un genuino espíritu fraternal, evidenciando la cercanía entre pueblos que comparten valores universales como la dignidad, el amor por la infancia y la esperanza en un futuro mejor.

Con esta visita, El Salvador y el Reino de Marruecos dan un paso firme hacia la consolidación de una relación estratégica basada en la confianza mutua, el respeto y una visión compartida de progreso, donde la niñez es colocada en el centro de las prioridades. Gabriela de Bukele ha manifestado su profunda gratitud por la cálida acogida, y su admiración por el trabajo ejemplar que se realiza en Marruecos en beneficio de las nuevas generaciones.

Sin duda, se trata de una visita que quedará grabada en la memoria diplomática de ambos países como un momento clave de encuentro, solidaridad y compromiso con las futuras generaciones. Una visita que habla el lenguaje del corazón, del servicio y del amor a la infancia.